¿Echas de menos la sensación de salir de la barbería con la piel fresca y sin irritación después de una afeitada profesional? Aquí te presentamos diez pasos sencillos que puedes seguir para replicar esa experiencia en casa. No necesitarás de un barbero para obtener una afeitada suave y sin irritaciones.
El primer paso para lograr una afeitada suave es la exfoliación. Este proceso de limpieza profunda elimina las células muertas de la piel y suaviza la textura de tu barba, permitiendo que sea más eficiente y sin complicaciones. La exfoliación también puede prevenir los pelos encarnados, estimulando que el crecimiento del vello sea sano y uniforme. También, puedes usar un gel exfoliante específico para tu tipo de piel, masajea suavemente la mezcla en tu barba y enjuaga con agua tibia, tu rostro se sentirá limpio y renovado.
¿Recuerdas esa sensación de relajación cuando el barbero aplica una toalla caliente y húmeda en tu rostro? Esta no es solo una manera de consentir tu piel, tiene un propósito práctico: ablandar los folículos pilosos y abrir los poros, facilitando el afeitado. Puedes replicar esta experiencia en casa remojando una toalla en agua caliente, escurriéndola bien y aplicándola sobre tu rostro durante unos minutos. Sentirás tu piel suave y flexible.